Nada, que no hay manera que el niño/niña haga las tareas. Prefiere ir a la suya e ignorarnos, ni la amenaza del castigo consigue deponer su actitud. Este es un problema que ya no es que preocupe, exaspera al padre/madre más paciente.
¿Qué podemos hacer? en muchas ocasiones damos la batalla por perdida y acabamos nosotros haciendo las tareas en cuestión (recoger los juguetes, poner la mesa etc) pero sabemos que estas no son maneras. Seguramente en el colegio nos han dado algunas indicaciones al respecto «hacerle al nene una tabla de tareas y se la poneis en la nevera u otro sitio a la vista, si cumple con una de las tareas se le pone una estrella y cada «x» se le premia». La idea no parece mala pero…nos quejamos de los niños y muchas veces los padres también somos perezosos a la hora de hacer estas cosas…aunque si ya la tenemos hecha parece como que te animas a probar.
Resulta que el método funciona: conseguir un objetivo y obtener una recompensa supone un reto que los niños interpretan como un juego, lo que les lleva a hacer lo que se es dice por la sencilla razón de la motivación. Tal vez no sea la panacea, pero nos puede ayudar en determinados aspectos que nos urge solucionar.Con esta tabla de recompensas tiene el material que necesitas para poner en buen camino al mozalbete/a. La tabla es magnética y viene con mucho material: 80 tareas preimpresas, 3 placas de identificación, 300 estrellas de evolución, una bolsa de transporte y 4 bolis. En la tabla hay suficiente espacio para «programar» hasta 10 tareas, aunque recomendamos no agobiar al niño en exceso y asignarle las que más nos preocupan, ya que cuando le coja el gustillo y vea que merece la pena hacer lo que se le pide, estará más predispuesto a hacer más cosas. La tabla no es un chollo, cuesta lo que cuesta, pero si consigues que tu hijo haga lo que le dices es más que un chollo; es un alivio como la copa de un pino.
Gráfica aproximada de evolución de precios:

También puedes ver aquí otros chollos de Amazon.